domingo, 19 de febrero de 2012

Sr. Rajoy, ¡Devuélvame mi voto!

Sabido es que los políticos, en general, no cumplen las promesas que de forma gratuita hacen durante las campañas electorales, pero lo ocurrido en las últimas elecciones presidenciales en este país sobrepasa todos los límites de la ética y la decencia, puesto que no solo no cumplen las promesas, sino que hacen justamente todo lo contrario.

Después de siete años, en los que el Partido Popular en lugar de realizar una oposición, que es lo que se esperaba de ellos (y para eso se les pagaba) se han dedicado a hacer una autentica obstrucción, impidiendo al gobierno hacer nada, criticando de forma feroz las “improvisaciones” del ejecutivo, lo que daba a entender que ellos si tenían las ideas claras, han repetido hasta la saciedad, que ellos nunca apoyarían una rebaja en los despidos laborales ni en materias sociales.

Pues bien, con este permanente discurso han llegado al poder de forma no de mayoría, sino de absolutismo, parece mentira que no recordemos el daño que hizo el famoso “rodillo” socialista de Felipe González y lo primero que hacen no es abaratar el despido, sino regalarlo.

Eso da para una primera reflexión, o no tenían idea de donde se metían, o sencillamente improvisan como el tan criticado ZP, con lo que se puede sacar la conclusión de que con su obstrucción han hecho perder siete valiosos años a este país.

Pero no nos lamentemos de lo que se podía haber hecho, sino de lo que se ha hecho y nos ha llevado a esta situación y me refiero a la campaña compacta y sin fisuras.

Para ponernos en situación, transcribo un párrafo de la Ley General de Publicidad, Ley 34/1988, de 11 de noviembre de 1988, General de publicidad (BOE núm. 274, de 15-11-1988) que en el articulo 4º de las disposiciones generales del título I dice: “Es engañosa la publicidad que de cualquier manera, incluida su presentación, induce o pueda inducir a error a sus destinatarios, pudiendo afectar a su comportamiento económico, o perjudicar o ser capaz de perjudicar a un competidor.
Es asimismo engañosa la publicidad que silencie datos fundamentales de los bienes, actividades o servicios cuando dicha omisión induzca a error de los destinatarios.”


A la luz de esta ley, se puede afirmar de forma categórica, que el Partido Popular a engañado a la sociedad española, y es ese engaño el que les ha llevado al poder.

Personalmente me siento ENGAÑADO y es por ese motivo que LE EXIJO SR. RAJOY QUE ME DEVUELVA MI VOTO y me atrevo a decir que, como yo, muchos otros votantes se sienten ESTAFADOS y su discurso a día de hoy carece de la más mínima credibilidad.

Para colmo de cinismo, les oímos en su congreso de Sevilla, que trabajaran por la transparencia y la honestidad, eso sería toda una novedad, porque por lo que se esta viendo, donde gobiernan, no conservan facturas ni del dinero (que es de los ciudadanos) que se gastan de forma arbitraria y caprichosa y ante las sombras de sospecha, cierran filas en apoyo de los sospechosos y la lista es muy larga.

Por todo lo expuesto, considero que las pasadas elecciones están basadas en una campaña engañosa por lo que deberían considerarse nulas y repetirlas. Desde aquí invito a las instituciones democráticas y a los ciudadanos en general, que denuncien ante los tribunales esta situación para poder corregirla.

Es obvio, que desde su punto de vista, se consideran progresistas y no dudaran en decirnos que han conseguido dar un salto hacia delante de al menos treinta años y estarán en lo cierto, el problema es que su punto de partida sigue siendo 1936.

lunes, 6 de febrero de 2012

Prostiputas

De la prostitución se dice, que es el oficio más viejo del mundo, en clara alusión misógina al papel de Eva en la mitología cristiana, dejémoslo ahí de momento, pero lo que esta claro, es que la prostitución no es una novedad, en culturas muy antiguas ya existía y en función del papel que se le daba al sexo así era el papel reservado a las mujeres que practicaban el sexo fuera del matrimonio.

Así, podemos hacer una primera afirmación, la prostitución a lo largo de los tiempos ha estado directamente relacionada con el planteamiento sexual de una determinada cultura.

La idiosincrasia de una cultura, depende de innumerables circunstancias, pero si se pueden concretar tres pilares fundamentales, que están condicionados por agentes ambientales y a la vez condicionan toda la vida que se desarrolla dentro de esa cultura, estos tres pilares son; política, religión y sexo.

Por circunstancias que nos deberían explicar los sociólogos, la mayoría de culturas de la antigüedad son machistas, por ello la prostitución, históricamente ha estado orientada a satisfacer las necesidades de los hombre, negando tradicionalmente la apetencia sexual de la mujer.

Así encontramos en el Imperio Romano las sacerdotisas de Bestas, que estaban para que los viajeros y soldados desplazados, pudieran satisfacer sus necesidades sin molestar a las mujeres (ciudadanas o esclavas), eso sí, los señores pudientes disponían de las cortesanas, que era lo mismo, pero “más limpias”, seleccionadas y reservadas para unos cuantos.
Similar a las cortesanas romanas serían las famosas geishas, educadas para satisfacer a los hombres, no solo en el terreno sexual, sino también en la música, la poesía y otras artes.

Pero dejemos la historia y acerquémonos en el tiempo, el mundo de la prostitución en las últimas épocas se encuentra dividido, entre la negación represiva de una moral victoriana, la explotación en régimen de esclavitud, la marginación a un mundo sórdido, generando sentimientos de compasión, desprecio y toda suerte de interpretaciones generalistas, motivadas por intereses o posiciones previas.

Vamos a ver, las cosas son tan complicadas o tan sencillas como las queramos plantear, por un lado existe una demanda, cuando me apetece darme un homenaje gastronómico, acudo a un restaurante, también podría cocinar yo, si me duele la espalda, voy a que me hagan un masaje, pero… y si me apetece echar un polvo épico, ¿Por qué no puedo acudir a una profesional? Si lo analizamos de forma objetiva, todos estamos prostituidos, ¿o acaso el científico que pone sus conocimientos al servicio de un gobierno beligerante a cambio de un plato de lentejas, o simplemente de reconocimiento, no esta tan prostituido como la puta más baja? La moralina imperante nos hace creer, que trabajar con nuestra manos nos dignifica, aun que sea en régimen de esclavitud, cosiendo zapatillas deportivas, para enriquecer a una multinacional carente de escrúpulos, pero si una mujer trabaja con su vagina, es una puta, y decimos esto llenándonos la boca con el mayor desprecio, esa mujer ¿sería más feliz trabajando en una “maquila” por un sueldo miserable? Y ahí aparecen los bien pensantes, diciendo que la prostitución es un trabajo inmundo, miserable, ruin.

Ciertamente puede ser un trabajo ingrato, sobre todo por el rechazo generalizado que esta sociedad les dedica, pero si hacemos inventario de profesiones ingratas, está no sería la única, un pocero que se dedica a desembozar albañales llenos de detritus fecales, se siente orgulloso cuando hace bien su trabajo y ciertamente es un trabajo necesario, como el de matarife, siempre salpicado de sangre, destripando animales indefensos, para que nosotros podamos degustar una carne con el trabajo sucio ya hecho.

Un planteamiento; El mundo de la publicidad nos esta vendiendo últimamente, que el sexo es salud, y eso es una máxima constatada, en vox populi, del que va mal humorado se dice que va mal follado, o cuando el jefe nos echa una bronca agria, directamente decimos “este no ha follado hoy”, si un hombre, y perdonar que mantenga el planteamiento machista, no tiene pareja estable, ¿Qué tiene que hacer? Esta claro, para la mentalidad moralista aguantarse, o sea privarse de salud y castigar a quienes le rodean con su frustración e insatisfacción.

En el mundo de la soltería, muchos recurren a comer en los bares, llevan las camisas a lavar y planchar a un comercio especializado y así con muchas otras cosas, pero cuando llega el tema del sexo, o salen a cazar como depredadores o se han de conformar con la masturbación, tal vez sea el momento de hacer un planteamiento objetivo y justo.

Los servicios sexuales, como su nombre indica solo son un servicio y en lugar de juzgarlo y prejuzgarlo, lo que se debería de hacer es reglamentarlo, pero los sucesivos gobiernos lo aplazan, unas veces por miedo a los sectores más conservadores, otras por que hay otras prioridades, otras por que lo ven como un escándalo o porque los medios de generación de opinión se dedican a presionar diciendo que los vecinos están artos, que hay un colegio en la proximidad, etc.

Las cosas por su nombre, en este tema, como en tantos otros hay una gran hipocresía y una doble moral, sutilmente los señores más conservadores, desprecian a las “bestesas” pero se sienten alagados cuando están rodeados de “cortesanas”, o sea, putas finas, educadas, cultas, y… carísimas, porque después de todo, “no lo pueden evitar, son tan machos”.

¿En que consistiría una reglamentación?, pues en primer lugar, reconocer a estas personas como trabajadoras, que no es poco, y a partir de ahí establecer sus derechos y sus obligaciones.

Empecemos por lo segundo, aun que ambas cosas están relacionadas.

1. Inscribirse como trabajador, ya sea autónomo o por cuenta ajena.
2. Pago de su IRPF correspondiente.
2.1. Como todo hijo de vecina.
3. Pago del IVA
4. Pago de la cuota de la Seguridad Social.
4.1. Derecho a asistencia médica.
4.2. Baja laboral.
4.3. Jubilación.
4.4. Declaración de enfermedades profesionales.
5. Carné profesional con sus correspondientes Inspecciones Técnicas que garanticen la ausencia de enfermedades de transmisión.
6. Establecimiento de horarios y lugares para trabajar.
7. juramento de confidencialidad.

1. Inscribirse como trabajador, ya sea autónomo o por cuenta ajena.- Según fuentes que dicen estar bien informadas, hay miles de personas que practican la prostitución, unas de forma voluntaria, otras bajo extorsión, secuestro, amenazas y un sin fin más de situaciones de violencia, y eso si que no puede ser tolerado de ninguna de las maneras. Al inscribirse como profesionales, haría un primer filtro, las personas extranjeras (que es el colectivo más utilizado por las mafias) serían identificadas, y de no tener “papeles de residencia”, domicilio conocido, etc. No se les debería permitir, al tiempo que deberían pasar una “ITV” previa, donde un psicólogo valoraría si la decisión es voluntaria o inducida de forma violenta, al tiempo que se verifica que se carece de enfermedades de transmisión. Ya sabemos que las mafias sobornarían a las personas que tuvieran por misión otorgar el carné de profesional, pero eso ya sería corrupción, y siempre es más fácil de detectar, o sencillamente disponer de medidas de control.
2. Pago de su IRPF correspondiente.- Si son tantas personas como dicen, este sería un buen pellizco para las arcas públicas y en los actuales tiempos de crisis no vendría nada mal.
3. Pago del IVA.- La prostitución, legal o no, es una actividad económica que según los entendidos, mueve millones de euros, pues a tributar.
4. Pago de la cuota de la Seguridad Social.
4.1. Derecho a asistencia médica.- Como cualquier trabajador.
4.2. Baja laboral.- Como cualquier trabajador.
4.3. Jubilación.- Como cualquier trabajador.
4.4. Declaración de enfermedades profesionales.- Este apartado, como en cualquier otra profesión, debería ser cubierta por la correspondiente mutua, con sus subsidios, indemnizaciones y demás prebendas.
5. Carné profesional con sus correspondientes Inspecciones Técnicas que garanticen la ausencia de enfermedades de transmisión.- La salud no es una cosa lineal, por lo que se debería pasar una “ITV” sanitaria de forma periódica, aquí no estamos hablando solo de sida, hay muchas más enfermedades, hepatitis, herpes y un largo etc.
6. Establecimiento de horarios y lugares para trabajar.- lo del horario dejémoslo abierto, pero lo del lugar debería de quedar muy claro, al igual que en todos los municipios está prohibida la venta ambulante, la prostitución callejera debería de erradicarse, los motivos son obvios, pero por si alguien no cae en la cuenta son dos, lo del escándalo publico, vamos si hay niños cerca etc. Distracción de conductores que están circulando y la más importante, la salud pública, se debe garantizar la higiene para las profesionales así como de los clientes y sobre todo para los transeúntes. Este tema me lo conozco muy bien, he sido vecino en Barcelona de lo que se conocía como “Comdom Valey”, el suelo estaba infectado de preservativos, pañuelitos de papel y toda suerte de desechos relacionados.
7. juramento de confidencialidad.- Esto parece una broma, pero no lo es. Se debería garantizar, al igual que en otras profesiones, que la relación con los clientes es confidencial, bajo fuerte sanción, imaginemos que un profesional de la prostitución acabara en un programa televisivo de esos al uso, como ya lo están haciendo más de uno y más de una, contando con quien se han acostado y demás detalles.

Por último quisiera glosar las excelentes virtudes de las buenas profesionales, por unas cuantas monedas, consuelas a las almas solitarias, necesitadas de una caricia, de un trato humano, son refugio de soledades, de experimentar cosas nuevas que con tu pareja no te atreves, cubren insatisfacciones y no cabe duda que ejercen de psicólogas.

Se podrían decir muchas cosas más, pero para resumir solo diré: LEGALIZACIÓN Y NO A LA EXPLOTACIÓN.