domingo, 13 de febrero de 2011

ETA, ETA, MÁS METRALLETA

Dicen que el pueblo que olvida su historia, esta condenado a repetirla, y aquí no solo la olvidamos, sino que la recordamos como más nos conviene.
Hoy el clamor contra ETA es casi unánime, sobre todo entre los demócratas de bien y no queremos recordar en modo alguno, que en alguna ocasión hemos pensado de otra manera. Los que ya tenemos cierta edad, vamos, que allí por los 70 ya éramos conscientes y participamos en la España de aquel momento, en alguna ocasión coreamos el eslogan “ETA, ETA, MÁS METRALLETA”.
Si hacemos examen de conciencia, tendremos que reconocer que la España actual tiene una deuda con ETA pues fue el magnicidio de Luis Carrero Blanco el que rompió la perpetuación del franquismo.
Las leyendas urbanas, atribuyen una importante participación a los que ahora son tan amigos del Sr. Aznar. Si, los americanos en los años 70 ponían y quitaban gobiernos según sus intereses, aunque en este caso, no esta ni confirmado ni desmentido, pero no cabe duda que la mano ejecutora fue ETA.
¿Qué paso después? Es ahí donde ETA perdió el tren, en lugar de trabajar con las demás fuerzas políticas para consolidar los cambios, siguió en solitario una guerra por unas aspiraciones que hubieran podido canalizar por medios menos dolorosos, causando gran dolor y rechazo con sus barbaridades, sufriendo la persecución y represión, generando una espiral absurda y ridícula.
Esta espiral, se puede comparar con el triangulo del fuego (combustible, comburente y calor), cualquier técnico en prevención sabe que la forma de acabar con el fuego, es aislar uno de los componentes, de esa manera, si las aspiraciones más radicales del nacionalismo en Euskadi pueden canalizarse mediante un partido político, ETA perderá cualquier razón de existir, si es que se le pueden llamar razones a eso.
En ese contexto, bien venido sea SORTU, ya se que corremos el riesgo de ser engañados, pero si solo actuamos con miedo, no avanzaremos y el circulo vicioso solo se romperá con inteligencia y generosidad.
Dicho sea de paso, todo eso del nacionalismo, resulta muy romántico, pero poco más, por un lado, Europa pretende hacerse grande y fuerte, para poder competir con los gigantes chinos y norteamericanos, pretender hacerse frágil y pequeño se me antoja que no es lo más inteligente, y lo digo desde Catalunya por lo que, algo se del tema.
A Einstein se le atribuye la frase “Si buscas resultados distintos, no hagas siempre lo mismo”, algo deberemos cambiar.